La alcaldesa, Mamen Sánchez, y el CEO del Grupo Reche Fernández, y presidente de la Fundación María Fernández Vega, Juan Manuel Reche Fernández, han firmado esta mañana el contrato de adjudicación, a favor esta entidad, de la concesión administrativa de una parcela de equipamiento público de propiedad municipal, situada entre la calle Pizarro y la avenida de los Marianistas, que irá destinada a la construcción de una residencia para personas mayores con 120 plazas.
En el acto de la firma han estado presentes la teniente de alcaldesa de Economía y Hacienda y Patrimonio, Laura Álvarez, la directora de la Fundación, Ana Masegosa, el arquitecto responsable del proyecto, Andrés Oller, así como técnicos de la Unidad de Patrimonio que han trabajado en la gestión de este contrato.
Como ha explicado Mamen Sánchez, la firma de esta concesión administrativa que se adjudica el Grupo Reche Fernández, a través de la citada Fundación, va a permitir la construcción de una residencia de mayores “con una inversión de ocho millones de euros y con capacidad para acoger a 120 personas para su cuidado y atención”, resaltando, además, que este proyecto “va a generar 60 puestos de trabajo directos”.
Igualmente, Mamen Sánchez ha subrayado la buena ubicación de esta nueva residencia, “en la parcela situada al final de la avenida de Los Marianistas, en el entorno de La Plata, una zona a la que estamos dando un cambio total. Este proyecto demuestra que estamos abriendo las puertas a las empresas que vienen para dinamizar la economía local, dar nuevos servicios y generar empleo”.
“Un hotel para mayores”
Por su parte, Juan Manuel Reche ha mostrado su satisfacción por la concesión administrativa de esta parcela, que tiene una superficie de unos 3.000 cuadrados, para su nueva residencia, la tercera que este Grupo construye en la provincia de Cádiz después de las de El Puerto de Santa María y Prado del Rey.
Tal y como ha declarado tras la firma, “venimos a sumar puestos de trabajo y a invertir ocho millones de euros, y sobre todo, a facilitar que los mayores de Jerez no tengan que irse a municipios limítrofes para recibir este servicio asistencial. Creo que estamos ante un proyecto muy bonito, bastante moderno y con características muy distintas a las de las residencias de hace unos años”.
Según su definición, “este centro será un hotel para mayores y va a gustar mucho, por lo que estamos muy contentos”, ha señalado el presidente de la Fundación, agradeciendo, a su vez, al Ayuntamiento “el que nos haya facilitado el trabajo en todo momento”.
Sobre la Fundación María Fernández Vega
Según la información facilitada desde la Fundación, esta entidad nace del Grupo Reche Fernández ante la necesidad social de seguir contribuyendo a la satisfacción de las necesidades en materia de servicios sociales y desarrollo humano, y que cuenta con una amplia trayectoria profesional y con una clara vocación socialmente responsable. El grupo cuenta con más de 1000 plazas gestionadas en el sector sociosanitario, repartidas a lo largo y ancho de todo el territorio nacional.
Efectos en la actividad local y el empleo
Con una inversión superior a los ocho millones de euros, se prevé crear unos 60 puestos de trabajo directos en la zona, contribuyendo indirectamente en el mantenimiento del empleo en sectores anejos de servicios y transporte. Además, a largo plazo, durante el periodo de concesión de 50 años, la residencia ofrecerá un impacto positivo en la economía local.
Descripción del proyectos
El proyecto, dirigido por un equipo gestor multidisciplinar e independiente, ofrece un modelo diferenciador respecto a otros desarrollos residenciales recientes; una nueva forma de entender, de comprender las necesidades de nuestros mayores.
El edificio se estructura en cuatro módulos de diferentes alturas comunicados entre si por un espacio central que envuelve toda la fachada .El diseño del edificio, modulado y sectorizado permite realizar diferentes programas funcionales dentro del mismo. Inicialmente está diseñado para albergar 120 usuarios, pero por su configuración puede convertirse en un centro intergeneracional donde personas de distintas generaciones, niños, adultos, etc., puedan compartir servicios y programas y así evitar las barreras espaciales y actitudinales que separan las distintas generaciones.
Cada módulo del edificio funciona autónomamente por lo que, en caso de pandemias, puede medicalizarse, sectorizarse sin que afecte al total del conjunto residencial .Igualmente, está configurado de tal manera que podrán crearse unidades de convivencia que es el objetivo que los diferentes agentes sociales llevan buscando y luchando desde hace años.
El conjunto lo forman seis niveles, planta sótano, planta baja, primera, segunda, tercera y cuarta, haciendo un total de 7.512 metros cuadrados y una inversión de más de 6.500.000 millones de euros. El complejo gira alrededor de un inmenso patio, cuya superficie es de más de 750 metros cuadrados ,y que será utilizado como jardín terapéutico interior .Se ha buscado la transparencia y la luz del edifico. Una apuesta innovadora en la que se integra el edificio al tejido urbano existente, creando diversas fachadas que le aportan dinamismo al conjunto.
El proyecto respeta y cuida el medio ambiente buscando la mayor sostenibilidad posible, desde la orientación, los sistemas constructivos o las instalaciones, con un alto aislamiento térmico y energético. También se han realizado propuestas innovadoras de ahorro energético y de agua, con la implantación de energías renovables, equipos de alta eficiencia, sistemas de trasiegos de caudal variable, tecnología free-cooling y recuperación de calor, iluminación LED. Asimismo, la INSTALACIONES instalación de purificadores de aire con filtros HEPA permitirá en épocas de pandemia no afectar al esquema energético del edificio planteado.